Con tanta tecnología rodeándonos los sentidos y con tantas aplicaciones que entre comillas nos resuelven la vida y la mejoran; caemos en la tentación de darle más importancia a las teclas de nuestros teléfonos celulares que a la voz de esa persona especial dándonos los buenos días o las buenas tardes, a veces hasta nos excusamos en un avance que quizás no nos acerca tanto como muchas campañas publicitarias afirman.
Podemos llegar a dejar de escuchar a personas realmente importantes o sus palabras; solo porque su rostro carece de pantalla y no está conectado inalámbricamente. Claro está; también existen los exagerados que si se va la luz en su casa, simplemente se les apaga la vida.
Nada como una llamada a eso de las 5 de la tarde para que la sonrisa vuelva a tu rostro después de un día de esos en donde el stress ha hecho estragos; sobre todo, si es de una persona que quizás no esta tan acostumbrada a hacerlo y que hizo un alto en sus concepciones.
No se trata de estar siempre gastando minutos o segundos que nos permitan las operadoras telefónicas; se trata de hacer la llamada adecuada en el momento indicado….después de todo…
Existen llamadas que siempre te hacen sonreír y nosotros deberíamos estar dispuestos a recibirlas…
Ismael Sandoval (@ismaeljsandoval)
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